sábado, 18 de septiembre de 2010

Libro: Al Anochecer. Capítulo.6.

Sabía que era su voz, la dulce voz que de la que me enamoré.
-Hola.- Contesté a su saludo.
-Yo... quería hablar contigo.- Me dijo notando su tristeza en su voz.
-Está bien.-
Puse las cosas para pagar y salí del supermercado con Manu a mi lado.
-Voy a dejar las cosas en casa y vamos a donde quieras hablar, ¿vale?.-
-Sí.- Respondió inmediatamente.
Dejé las cosas lo más rápido que pude, no sabía si quería hablar con él pero, algún día tendría que hablar sobre lo que ocurrió. Salí de la casa, allí estaba él.
-Bueno, ahora ya podemos hablar.-
-Kris.- Me cogió por la cintura y me abrazó, no sabía lo que le pasaba pero lo que sí sabía es que estaba llorando.
-¿Qué.. qué te pasa?.-
-Siento mucho lo que hize pero te juro que yo no quería besarla, fue ella.-
Me alejé un poco de él mirándole, ya sabía eso pero también sabía que había algo más.
-Sé que no es lo único que te pasa.-
-A ti no puedo ocultarte esto que me mata por dentro aparte de no estar contigo... Kris, mi padre ha... ha muerto.-
Me quedé sin palabras al decir eso solamente le abrazé con más fuerza que nunca.
-Lo siento, Manu.- Dije con un sollozo, no podía verle así.
-Kris, tú eres lo único importante que tengo ahora, te necesito.-
-Y yo a ti, siento haber dudado de ti.-Le besé tiernamente.
Mientras sus lágrimas iban cayendo, nos seguiamos besando con más necesidad que nunca el uno por el otro.
Le acompañé hasta su casa para no dejarle sólo por el camino no sabía la locura que podría hacer.
-¿Seguro que estarás bien?.- Le pregunté.- Si me necesitas, ya sabes donde estoy.-
-Te quiero.- Me besó antes de entrar.- Y mucho.-
-Y yo a ti siempre, Manu.-
Vi como entraba en casa y me fui hasta la mía.
Me duché y fui hasta mi habitación, me relajé un poco no paraba de pensar en Manu, lo mal que estaba, nunca lo había visto llorar de esa manera. Me acerqué hasta la terraza para ver si lo veía aunque, no encontré a nadie pero, se encendió las luces y allí estaba él, parecía como si fuera un muerto viviente.
-Manu.- Le llamé para ver si venía.
Parecía que se había dado cuenta de que era yo venía en dirección hacía la terraza.
-¿Qué haces aquí? vas a coger un resfriado.- Me dijo nada más salir a la terraza.
-Tranquilo, no te preocupes por mí, ¿estás mejor?.-
-Por una parte sí y por otra no.- Pude notar como si quisiera sacar una sonrisa.- La parte del sí, es que estás conmigo y la del no, es mi padre.-
-Yo nunca voy a dejarte ¿vale?.- Cogí una de sus manos que tenía en la barandilla.
-Yo no me perdonaría dejarte ir por segunda vez.- Dijo recordando lo que pasó con Julia.
Estuvimos toda la noche hablando hasta que llego la hora de despedirnos, mañana era Miércoles y no era festivo había que ir de nuevo al instituto pero, quedamos en ir juntos hacia el instituto.
Me acosté pensando en él no sabría cómo estaría ahora no quería verlo así, me era insoportable.

No hay comentarios:

Publicar un comentario